CDMX a 04 de diciembre de 2025.- En una sesión marcada por el debate sobre justicia hídrica, el senador Eugenio “Gino” Segura respaldó la aprobación de la nueva Ley de Aguas Nacionales, destacando que el recurso no puede seguir tratándose como mercancía, sino como un derecho esencial para todas y todos.
Segura señaló que, durante décadas la legislación de 1992 permitió que el agua funcionara como un bien transable, lo que derivó en la concentración del recurso en manos de grandes consorcios mediante la compra, venta y acaparamiento de concesiones. Según el legislador, esta dinámica abrió la puerta a la especulación y dejó en desventaja a comunidades rurales, productores pequeños y regiones afectadas por sequía.
El senador recordó casos de abuso en la distribución del agua, como la acumulación masiva de concesiones por actores políticos que incluso edificaron infraestructura hidráulica privada mientras miles padecían desabasto. “Esa era la realidad: agua para unos cuantos, sacrificio para la mayoría”, criticó.
Con la reforma recién aprobada —alineada con la visión de la presidenta Claudia Sheinbaum— Segura aseguró que se cierra el paso al mercado secundario de títulos y se fortalece la rectoría del Estado sobre el recurso. La nueva normativa también prioriza el acceso para quienes carecen del servicio y protege a los pequeños productores al evitar usos especulativos.
El legislador resaltó que cualquier excedente hídrico será destinado al Fondo de Reserva, en lugar de negociarse entre privados. “Hoy pasamos de un sistema que lucraba con la necesidad de la gente a uno que garantiza el derecho al agua”, afirmó.
Para Gino Segura, la reforma representa un giro histórico: “Cumplimos con la Constitución y con la ética. El agua vuelve a manos del pueblo”.